Explorando el bestiario
Seguimos con nuestro blog nuestro blog dedicado al fascinante mundo de los vampiros y sus diversas especies. En esta ocasión, nos adentraremos en el apasionante bestiario vampírico, centrándonos en aquellas criaturas cuyos nombres comienzan con la letra «C».
Callicantzaro-Grecia, Turquía, Albania o Bulgaria. Este es un caso particular de vampiro niño. Según el folclore griego y de acuerdo con Leo Allatius (teólogo griego), si un niño nace entre la navidad y la epifanía tiene que viajar al inframundo durante un año. Donde se la pasa aserrando el árbol que sostiene la tierra por si logra tumbarlo junto con la tierra. Y regresa en las mismas fechas al año siguiente para devorar la sangre de los humanos.
Y es ahí durante esos días que el árbol se cura y es cuando decide volver a seguir aserrándolo. Sus características físicas varían de región en región. Algunos afirmas que es grande, otros que es pequeño. Se le ha visto con grandes orejas de burro, garras o patas de cabra, ojos rojos. Se le asocia más al mito de los hombres lobos, porque en su traducción del turco Kara-kondjolos viene a ser algo así como hombre-lobo. Pero también se le ha mencionado en cuentos sobre vampiros. ¿Quieres acabar con él? Tienes dos opciones. La primera es que pongas un colador en la puerta de casa y deja que cuente los agujeros hasta que llegue la luz del sol y lo fulmine. La otra opción es que cuente hasta tres, ya que sólo pueden contar hasta dos. Si dice el número impar se suicida.
Jiang-Shi-China. Más bien zombies, ya que son cadáveres que han vuelto a la vida. La referencia más antigua que se tiene de este bicho data del siglo XII. Como muchos otros vampiros, éste no es la excepción. Es un humano muerto en situaciones extrañas o violentas. Tienen la piel extremadamente blanca e incluso verdosa. Esto les impide salir durante el día, ya que son muy débiles a la luz del sol. Se mueven como un zombie, o sea lentamente. Son ciegos y los únicos que pueden acabar con ellos son los monjes taoístas.
El mito deriva de la imagen de los monjes transportando los cadáveres de personas que habían fallecido fuera de su pueblo y volvían a él, ya que era muy caro el entierro en sus lugares de trabajo. Los monjes hacían sonar unas campanas cuando los llevaban, generalmente por la noche, para avisar a las personas que llevaban un muerto. Ya que ver uno dicen que trae mala suerte. La particularidad de este tipo de monstruo radica que, gracias a la influencia moderna de los chupasangre, se le dio la capacidad de chupar el líquido rojo. Antiguamente eran más bien vampíricos psíquicos, ya que chupaban el aliento de sus víctimas.
Chordewa-Bengalí-India.
Se convierte en un gato negro vampiro. Lo menciona el reconocido upirólogo e historiador Montague Summers. Pertenece a la tribu Oraon. En forma de gato entra a la casa de una persona moribunda para chupar su sangre al lamer sus labios. En su forma humana es una bruja, así que si logras hacer algún daño al gato/vampiro lo verás en la mujer. Con esta bestia también funcionan las estacas y exponerlos a la luz del sol. Lamentablemente, muchas mujeres fueron quemadas al ser sospechosas de ser uno de estos mitos.
Churel-India. El fantasma o espíritu de una mujer fallecida no purificada o mujeres embarazadas que fallecieron durante el festival del Divali. Suele ser, como en otros caso, una pobre desdichada que ha fallecido en un parto y vuelve para atormentar a los demás. Mira que no tiene mejor cosa que hacer. Se disfraza de mujer hermosa para poder atacar a sus víctimas masculinas.
En Pakistán también se le asocia a las brujas. Si se logra capturar una de ellas, hay que enterrarlas de una manera especial. Poner los pies mirando a la espalda y así no regresan de la tumba. Aunque es indio, al parecer su origen es persa. Se dice que trabaja para la diosa Kali y se la conoce como “la destructora”.
Cihuatateo-México. Se sabe que empezó a ser “popular” en Europa a raíz de las conquistas españolas en el siglo XVI. Aquí también son mujeres que fallecieron durante el parto. Curioso que este hecho se de en tantas culturas y en partes totalmente alejadas. Esta criatura regresa de entre los muertos tras pasar cuatro años al servici del dios sol Tonatiuh para matar a los niños de otras mujeres, como venganza por lo sucedido con ella. La parte positiva de este ser radica en que se la invocaba en la guerra para dar ánimo a los soldados, ya que para ellos su esfuerzo y sacrificio durante el parto les anima en la batalla. Sus parientes solían vigilar la tumba ya que estos soldados les gustaba robar ciertas partes de su cuerpo como amuleto para los combates. Su caso también es particular porque pueden mantener relaciones con hombres y tener bebes. Se le ofrece ofrendas en los cruces de carreteras y si al amanecer siguen ahí, el sol hará su trabajo.
Aquí os dejo una representación del Cihuatateo en el Museo del Templo Mayor, México.
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